Este artículo gira en torno a el concepto de creatividad, las artes plásticas, la educación artística y la creación a lo largo de la historia. Para evaluar la evolución del término de creatividad se hace un recorrido por conceptos como realidad, belleza, naturaleza, conocimiento, producción, novedad y libertad.
Actualmente,
asociamos los conceptos de artista y creador como sinónimos y hacemos que nos
parezcan inseparables, pero no siempre fue así. En la antigüedad, en cambio, la
actividad artística era trabajo de los esclavos y suponía un mero conocimiento
de las reglas.
No fue hasta el S.XX, cuando el término
de creatividad empezó a usarse como se utiliza hoy en día. Esto ocurre porque el término
Creatividad al igual que el de Arte es ambiguo, impreciso y ha sufrido
distintas consideraciones y evoluciones, y lo que es más importante porque está
influida por la cultura.
Respecto a
la ideología artística, se puede afirmar que la cultura, al igual que la
creatividad artística, consiste en la forma genuina de
búsqueda de soluciones a los problemas sociales, que son específicos y comunes
a un mismo grupo. Estas soluciones dependerán de determinados factores
ambientales y de relación con otros grupos sociales. Es precisamente en esta
interrelación de diferentes culturas en donde se centra la importancia que
tiene desde el punto de vista educativo de lo artístico. La razón es que se
toma la educación como una estructura, en la que las vivencias son ladrillos
que se unen a través de diferentes elementos donde el tiempo y el espacio son
los cementos de la construcción.
Por ello, desde esta perspectiva, es importante comprender
y analizar las formas que adopta la cultura con la intención de descubrir el
carácter auténtico que poseen el espacio y el tiempo en nuestro mundo humano, y
de este modo acceder a lo simbólico de la creación.
Esta
idea apoya la afirmación de que toda producción artística, surge en
particulares condiciones históricas y sociales y no se comprendería jamás dichas
condiciones especiales si no fuéramos capaces de captar los principios
estructurales generales que se encuentran en la base de esas obras. Por ello,
toda gran obra de arte se caracteriza por una profunda unidad estructural,
posee una estructura intuitiva y esto quiere decir un carácter de racionalidad.
Bajo
esta idea, considerando la cultura como un sistema, el arte sería un subsistema
de éste, por ello el arte está relacionado con las demás manifestaciones culturales
pero dependiendo siempre a los diferentes modos de transmisión cultural. Por
ello, se considera el arte como elemento de expresión, más que de lenguaje o
comunicación. Para concluir, se habla de la observación humana como forma de
aprendizaje significativo y la planificación como parte de la educación
artística.
Otro punto a destacar del
artículo, es como la creatividad
cambia en los niños y que es a partir del cuarto grado donde se le empiezan a
imponer reglas y pierde su carácter espontáneo y creativo, sin embargo, con los
años puede volver recuperar este rasgo y con ello, la confianza en si mismo.
Como conclusión de grupo, cabe destacar que
estamos totalmente de acuerdo con los principios de este artículo ya
que pensamos que la educación artística debe entenderse como un proceso
de reconstrucción continua de la experiencia, en el que la persona aprende y produce
el conocimiento a través de la relación con su entorno. De este modo, la
educación se concluye como una constante reorganización de las experiencias
humanas.